El fenómeno Rosalía se enfrenta este año a una prueba de fuego : la primera gira mundial de la artista que revolucionó el panorama musical en 2018 con su reinterpretación del flamenco en El mal querer y que presenta en directo Motomami , un disco en el que la balanza cae del lado de los sonidos urbanos y en el que de nuevo vuelve a hacer gala de la experimentación musical. La consagración de Rosalía
La gira de Rosalía para presentar Motomami comenzará en Almería (España), el 6 de julio, y recorrerá España antes de pasar por Latinoamérica, Estados Unidos y varias ciudades europeas, con como última parada del tour en diciembre.
Con millones de seguidores en redes sociales, la influencia de la artista es indudable, y todo lo que hace alcanza gran repercusión, en muchas ocasiones protagonizando polémicas, aunque su éxito musical es indiscutible, tanto para el público como para la crítica, no en vano Rosalía cuenta en su haber con ocho Grammy Latino (cinco, por su anterior trabajo) y un Grammy anglo al mejor álbum alternativo o rock latino por El mal querer .
Con esos antecedentes, y pese a los altos precios de algunas de las entradas, en el primer día de venta para los conciertos de la gira se vendieron más de 135.000 boletos.
Motomami World Tour será la prueba de fuego para el nuevo trabajo de Rosalía, un tanto alejado de su anterior disco , pero con el mismo furor entre el público, a pesar de que no han faltado también las críticas negativas por una evolución musical que la ha llevó del flamenco más puro de Los ángeles hasta Motomami .
“El flamenco ha sido mi base y es una gran inspiración. Siempre estará ahí. Se nota en Bulerías , en Sakura , en melodías de G3 N15 y de Diablo . Pero como dos años he viajado tanto y he conocido a gente que se expresa distinta, eso hace que mi lápiz se ve durante afectado y me gusta que sea así, porque es transparente con lo que está pasando”, decía la artista en una entrevista con ‘Efe’ tras el lanzamiento de Motomami .
Un álbum que no abandona del todo el flamenco, pero más centrado en los ritmos urbanos, y que resulta mucho más personal en cuanto a las letras de sus canciones: por primera vez, Rosalía publica un disco que no gira en torno a una temática preconcebida , como hizo con Los ángeles (2017), un trabajo conceptual sobre la muerte, y posteriormente con El mal querer (2018), sobre “la parte oscura del amor”, en palabras de la cantante, sobre la violencia de género en una relación sentimental.
“Soy igual de cantaora con un chándal de Versace que vestidita de bailaora”, canta Rosalía en Bulerías , siempre perseguida por la polémica: antes, criticada por caer en la apropiación cultural de lo flamenco, sin ser gitana, o por ser nominada a premios en la categoría de artista latina; ahora, por haber abandonado el flamenco que la arrojó a la fama.
Motomami “tiene un tono muy de diario, de material autobiográfico, cosa que nunca había hecho en otros proyectos. Son mis vivencias de estos tres años, mis reflexiones y mis emociones, el contraste entre ellas”, confesó la artista en aquella entrevista con ‘Efe’.
Entre esas vivencias, su relación con la fama: “No pa’ siempre se puede ser una estrella y brillar, voy a reírme cuando tenga 80 y mire pa’ atrás” , canta a capela en Sakura , la canción que cierra el álbum, y en La fama , la bachata que canta junto a The Weeknd y que fue el primer adelanto de Motomami , asegura que “es mala amante la fama y no va a quererte de verdad / es demasiado traicionera y como ella viene, se te va” .
“La que sale por TV no es la que yo conocí” , canta con voz sintetizada en Diablo , a lo que ella misma responde: “Yo mi lealtad nunca la pierdo, ni por el dinero” ; y tampoco parece olvidarse de algunas polémicas vividas en los últimos años cuando canta en Bizcochito “qué más da que me tire la mala, si Haraka me tira la buena, habla bullshit, to’ lo que dice falsea, y mi make-up en la ola de corea” , en lo que parece una clara referencia a los titulares protagonizados por la rapera Mala Rodríguez.
No faltan en las canciones de Motomami referencias a exparejas sentimentales de Rosalía, en las que muchos han querido ver mensajes dirigidos a C. Tangana, del mismo modo que en las canciones y videos del madrileño parece haber claras referencias a la catalana, y es que ambos fueron pareja antes de que El mal querer convirtiera a Rosalía en una de las grandes estrellas de la música actual.
Motomami World Tour’ llegará a 46 escenarios, y tras las diez ciudades españolas –con cita doble tanto en Madrid como en Barcelona–, Rosalía actuará en agosto en Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey (México); São Paulo (Brasil), Buenos Aires (Argentina), Santiago de Chile (Chile) y Bogotá (Colombia). En septiembre llegará el turno de La Romana (República Dominicana) y San Juan (Puerto Rico), y de Estados Unidos y Canadá, con actuaciones en Boston, Nueva York –con dos conciertos en el Radio City Music Hall–, Toronto, Washington, Chicago, y Miami, entre otras ciudades. La consagración de Rosalía